en poco
tiempo la fama de Andrew Smiles se extendió por todo el país
como se derrama la leche en un desayuno apresurado... Nueva York, Chicago,
Los Angeles, San Francisco... todas caían a sus pies admirando el
prodigio de madera que frente a ellos se presentaba.... |
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Andrew,
con su fiel mayordomo Paxon quien le sujetaba durante sus actuaciones
dados sus problemas de estabilidad sobre el escenario |
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sus hazañas
no tardaron en traspasar fronteras... el mundo requería ver esa maravilla
con chistera que hacía las delicias de los americanos... así
que la leyenda del muñeco que hablaba empezó a reescribirse
en todos los confines del planeta... |
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Andrew,
siempre receloso de su numeroso equipaje, se encargaba personalmente
de comprobar que se trataba con los cuidados que se merecía
una estrella de su talla (tanto de madera como de altura) |
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ese fue el desencadenante
de todo... viendo la fortuna que había amasado Andrew y en qué
se estaba convirtiendo por su mala cabeza (llena de serrín, por supuesto),
su - hasta ese momento - fiel criado, Paxon, le traicionó encerrándole
en una maleta andrajosa (ni siquiera tuvo estilo para meterle en una recubierta
de terciopelo) y enviándole a una ciudad del Congo belga de nombre
impronunciable... allí se perdió el rastro de Andrew Smiles... |
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El
FBI consiguió captar gracias a sus satélites Mata
Hari el momento exacto de la vil traición sufrida por Andrew.
Paxon fue arrestado años más tarde en Cancún
y condenado dos años más de los que le pertocaban
según la sentencia, por su mal gusto con las camisas |
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el otro día,
pasando por la bambalinas me pareció escuchar un repiqueteo en un
baúl enterrado entre mil y un artilugios viejos... cual no sería
mi sorpresa cuando en su interior una figura de madera intentaba hablarme
y se llevaba las manos a la garganta asustado... lo intentamos con todos
los tipos de gárgaras imaginables, medicamentos de todos los colores,
centenares de jarabes de los gustos más diversos... pero nada fue
suficiente para hacerle recuperar el habla... así que recurrimos
a la tecnología de los microchips y el silicio... desmonté
una vieja tostadora de pan y con ella preparé un circuito integrado
gracias al cual me tiene amargado todo el día... :S empiezo a estar
realmente harto de aguantar los caprichos de una estrella que mide mucho
menos que yo y altamente inflamable... y eso me da ideas... :)
a partir de ahora y de forma espero que más o menos regular, Andrew
se pondrá a pinchar canciones y a contar parte de sus tonterías...
espero que no sean demasiado para tan distinguida audiencia y que le ayudéis
a mejorar (si su orgullo os deja)...
gracias por vuestra atención... |